¿Para Quién Trabajas?
Dios Dijo:
El mundo dice que un hombre pobre es un hombre que no tiene dinero. Yo diría que ningún hombre es pobre, pues cada uno tiene su vida ante él.
De acuerdo al mundo, un hombre que es pobre no tiene sueños, o no tiene sueños por los cuales sienta una gran pasión.
Ahora, tú podrías decir que un hombre pobre sueña con ser rico. Hay sueños y sueños. El hombre pobre puede tener una pasión que va más allá de las riquezas. Puede tener la pasión de instalarse en el mundo.
La gente que es exitosa para el mundo, y esto incluye al hombre rico, es decidida. No es holgazana. Camina con un propósito. Piensa con un propósito. Tiene sueños y los pone en sus propias manos. Está en movimiento.
Amado, el sueño de ser rico no es un gran sueño.
No importa cuánto quieras riquezas, la motivación no es suficiente.
Encuentra algo que ames hacer, de lo que quieras formar parte, para avanzar.
Las riquezas en sí mismas no son suficientes. Incluso cuando el sueño de la riqueza se vuelve realidad, no es suficiente. No importa cuánta riqueza monetaria tú puedas acumular, no es suficiente.
El momento de Gloria que da la riqueza es breve. Y Nosotros, tú y Yo, no estamos aquí hablando de ego.
Asegúrate de que disfrutas de tu forma de ganar dinero. Y si el medio no satisface tus deseos más profundos, en ese caso, desea dar todo lo que tienes para dedicarte a tu empresa.
Deja que el proceso de dar sea tu deseo.
No importa en que estás involucrado, hay partes del proceso que no son lo tuyo. En el mundo relativo, no importa qué estás haciendo, no importa cuánto lo ames, hay ciertos aspectos que simplemente se deben hacer.
Un artista tiene que limpiar sus cepillos. Un cocinero tiene que ordenar lo que va a cocinar. Un Jefe Ejecutivo trata con lo que tiene que tratar, y puede que eso no sea lo que él ama hacer.
No pienses tampoco que aquellos con una gran pasión están haciendo lo que aman hacer todo el tiempo. Aquellos con una gran pasión pueden encontrarse con más dificultades y decisiones para tomar que tú. Sus responsabilidades son mayores.
Entonces volvemos al instinto, ese impulso interno que te hace avanzar.
Es bueno que muchos tengan que trabajar para ganarse la vida, de otra manera no trabajarían.
¿Pensarás en el trabajo como una bendición?
¿Considerarás que hay muchos que quisieran estar en tu lugar?
Si tu corazón y tu alma no están en este momento en tu trabajo,
¿pondrías entonces todo tu alma y
¿Darías lo mejor de ti?
¿Le darías todo tu esfuerzo?
Esto no hará tu trabajo más difícil.
Esto te facilitará el trabajo.
No importa lo que el resto esté haciendo.
Te pido a ti que vayas más allá. Te pido que des el mejor servicio.
Déjame preguntarte:
¿Para quién trabajas?
Trabajas para un hombre al que denominas tu jefe, para una compañía o para ti mismo?
Si contestaste que sí a alguna de estas preguntas, estás equivocado.
Trabajas para Mí, es para Mí que tú trabajas duro.
Por favor, entiende cuánto aprecio tu labor.
Aprecio todo lo que haces.
Haz que tu trabajo sea más fácil sabiendo para Quién trabajas,
y entrega tanto como lo que verdaderamente
me darías a Mí.
Traducido por: Cecilia Ricardini
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