miércoles, 10 de octubre de 2007

Sagrada Orden del MVM Melquizedek


Sagrada Orden del MVM Melquizedek

Miércoles 10 de Octibre de 2007 
Queridos Hermanos:
Nuevamente me presento ante ustedes para delinear una serie de criterios en los que basaremos nuestros trabajos.
Quiero mencionar antes de enumerarlos que cada uno de estos tiene como objetivo limpiar el terreno mental en los que cada uno de los servidores trabaja.
Cada uno de ustedes viaja por la vida aceptando y rechazando una serie de datos y comentarios que recibe de muchísimas fuentes, que en ocasiones siembran creencias o paradigmas que configuran una visión del mundo que no corresponde a la realidad espiritual.
Dense cuenta que los tiempos de la Tierra no son similares a sus tiempos. Dense cuenta que la Tierra no es el único planeta habitado del Universo ni nosotros somos los únicos seres en el mundo que trabajan por el bienestar de la humanidad.
Me propongo en este comunicado colocar algunas cosas en el sitio donde deben estar, y derrumbar algunos de los ídolos   que muchas veces se construyen bajo la falsa creencia de que nosotros somos indispensables para salvar al mundo.
Los enumeraré y servirán como guía de trabajo en las futuras referencias que ustedes tengan que hacer para la toma de decisiones en sus vidas.
1.    La Tierra no se encuentra en riesgo. En los últimos tiempos se ha desatado una fiebre entre los discípulos de las diferentes escuelas que apuntan a que la Tierra se encuentra en un riesgo inminente debido a múltiples factores relacionados, algunos con la actividad humana y otros con cuestiones ajenas a ella. La realidad es que la Tierra no se encuentra bajo ningún riesgo, de hecho la Tierra como planeta tiene mecanismos de defensa que aún no ha empleado y que podrían regresar, si así fuera necesario, los niveles de calidad atmosférica o de estabilidad geológica que en opinión de algunos están alterados.
2.    La humanidad está pasando por una etapa de despertar de conciencia, pero en ningún momento saldrá evacuada del planeta, ni subirá a ninguna otra dimensión, ni cambiará ninguna cualidad del tiempo. Lo que realmente pasará es que la humanidad tendrá un despertar que lo llevará a una nueva era de conciencia donde los valores humanos y el retorno a lo básico de la existencia y la búsqueda de la felicidad serán las prioridades. Esto significa que los grandes avances que la ciencia está logrando pertenecen precisamente a este despertar, pero como nos encontramos en las primeras etapas, lo que está ocurriendo es que la ética no ha avanzado lo suficiente para contrarrestar los avances técnicos causando que haya una serie de suposiciones desviadas sobre la forma como estos avances serán materializados en la vida diaria. Lo que se va a observar _y esto es parte de lo que se está trabajando por los enviados externos de la Jerarquía_ es el desarrollo de una nueva ética de la ciencia, ética de la política, ética de los gobiernos, ética de la economía, ética de la educación. Este movimiento impulsado por la Jerarquía compensará los avances y desvíos que se están dando en muchos de los campos de la actividad humana.
3.    Nosotros no venimos a salvar al mundo. Ningún ser humano equilibrado puede esgrimir ese argumento. Si el mundo no está en peligro y la humanidad tampoco lo está, nadie requiere ser salvado. Por lo tanto visualicemos nuestro trabajo como parte de una cadena de servicio que se viene dando desde el principio de los tiempos por aquellos servidores de la luz que se han comprometido con el Plan de educación de la humanidad.
4.    Ninguna de las tareas que hacemos es obligada.  Cada uno de los discípulos es responsable de sus decisiones y nadie tiene el derecho de forzar a alguien a que desarrolle tal o cual actividad.
5.    Nuestro trabajo tal como lo comenté en mis comunicados busca dos objetivos primordiales:
a) Reconocernos entre nosotros como aquellos que llegamos a preparar la venida del Cristo y
b) Iniciar el trabajo de manera coordinada para que establezcamos una conexión confiable entre ustedes y yo para poder trabajar de la forma adecuada.
6.    La meditación en la que buscan la conexión conmigo no tiene que ser de determinada manera, ni tiene que cumplir con reglas especiales, simplemente coloquen su atención en algún lugar cercano al corazón y repitan mi nombre tres veces. El contacto se dará si perseveran y al mismo tiempo va buscando algunas de las áreas de su personalidad donde tendrían que trabajar para poder desarrollar la capacidad de conexión.
7.    No tengo ningún representante que pueda hablar por mi. Hay algunas personas que se han dado a la tarea de difundir estos comunicados, y algunos otros a quienes se ha encargado la responsabilidad de difundir y aclarar algunas de las ideas expuestas en mis escritos; sin embargo, ya expliqué que aunque ellos trabajen de buena fe, su palabra es la interpretación que hagan de las mías, también entiendo que mientras yo no pueda aparecer de manera pública seguirán siendo ellos los que difundan el mensaje.
8.    Insisto en que las instrucciones que se están dejando en las cámaras del corazón son precisas en cuanto lo que debe hacerse y siempre adecuadas a la persona que está meditando. Nunca se reciben comunicados o indicaciones para terceras personas. Siempre los comunicados son personales. Si alguien debe recibir alguna indicación, la recibirá por diferentes medios y no por una comunicación interna de otra persona.
Éstas son las indicaciones que les quiero dejar para este período. Medítenlas y repasen. Envíen sus preguntas al interno. Yo las responderé ahí.
 
Me despido dejándoles mi corazón.
   
Melquizedek.

domingo, 7 de octubre de 2007

¿Que HARIAS SI FUERAS DUEÑO DEL MUNDO

¿QUÉ HARÍAS SI FUERAS DUEÑO DEL MUNDO?

Y un poderoso magnate de Damasco, dueño de grandes campos de labranza y de numerosos rebaños de camellos, ovejas y asnos, interrogó al Maestro pidiéndole una más clara explicación de sus doctrinas sobre el Reino de Dios y el modo de conquistarlo.

- Si tú fueras dueño del mundo ¡Oh Profeta! ¿cómo ordenarías para hacer felices a todos? ¿Mandarías cortar la cabeza a todos los ricos y repartir sus bienes entre todos los pobres?

El Maestro sonrió abiertamente y lo miró unos momentos antes de contestarle:

"No, amigo mío. No mandaría cortar la cabeza a nadie porque sólo Dios es dueño de la vida otorgada a sus criaturas. En este plano inferior de la Tierra, la mayoría de los seres no comprenden otro bien que el puramente material, y se aferran a él con una tenacidad que espanta. Como las fieras se traban en encarnizada lucha por los sangrientos trozos de carne muerta, así la mayoría de los habitantes de la tierra pisotean los más puros y santos afectos, cuando han sido tocados, en lo que ellos llaman propiedad suya exclusiva. Por unos estadios de tierra, se matan aquí centenares y miles de hombres.

Me has preguntado, ¿qué haría yo si fuera dueño del mundo? Obligaría a los grandes terratenientes a dejar libertad de cultivar sus tierras a todos los que estuvieran desposeídos de ellas, para que sacaran de allí el sustento para sus vidas, y a la vez, le dieran utilidad al poseedor de la tierra, mediante el pago de un tributo justo, ecuánime y razonable. Nada de amo, de señores tiranos y déspotas, que látigo en mano estrujan la vida del labrador, que deja prematuramente entre los surcos por trabajos forzados, tal cual se hace con feroces criminales dañinos para la sociedad.

Y en todo orden de bienes materiales, haría lo mismo. La tierra es de todos los hombres, que Dios autor de la vida ha mandado a ella, como es el sol, el aire, la luz y la lluvia. Y en este instante paréceme ver al feroz y monstruoso egoísmo, como un buitre con rostro humano que se desespera y enfurece por no haber encontrado aún el modo de acaparar el aire, la luz y el sol, para venderlos en pequeños átomos y a precio de oro.

 ¡Aún quisiera poder vender el derecho de respirar, de contemplar el espacio azul y de recibir los rayos del sol!...

Esto nos prueba hasta qué punto es baladí y sin fundamento lógico, la propiedad sobre la tierra, sin lo cual se puede vivir en paz y gozar los dones de la vida.

Anda amigo mío y recorre los suburbios de esta populosa ciudad donde en cada choza vive hacinada una numerosa familia. Escucha las quejas de la madre que no alcanza a dar a los suyos el pan necesario para la vida con una mísera medida de trigo que trae el padre al hogar después de haber trabajado duramente de sol a sol. Escucha el llorar de los niños que piden pan, y el padre recoge bellotas de encina que alimentan a los puercos, y se las da a sus hijos que lloran de hambre.

Escucha el gemido de los ancianos que tiemblan de frío junto al hogar apagado, porque los grandes señores dueños de los bosques, quieren un sextercio por la leña que puede llevar un hombre entre sus brazos, y el infeliz no posee en su bolsa ni un solo denario. Escucha el grito desesperado de los leprosos, de los paralíticos, de los ciegos que no pueden ganarse el sustento y que son arrojados de todas partes como larvas venenosas, porque su aspecto repugna a los que visten de púrpura y de oro: porque la conciencia dormida se despierta ante tal espectáculo y les grita: "¡esa piltrafa humana, es tu hermana!.. ¡Socórrele!

Anda amigo mío por esos tugurios, por esas covachas extramuros de vuestras doradas ciudades, por esas madrigueras de raposas, que no son otra cosa que las viviendas de nuestros hermanos desamparados... , anda y mira, y que tú, como todos los potentados de la tierra, no conocen de cerca el dolor del que carece de todo, porque jamás se ocuparon de otra cosa que de procurarse placer y comodidades.
Y cuando hayas visto esos cuadros que no son pintados en lienzos, sino en la carne viva y palpitante; cuando hayas oído todas esas quejas, esos gemidos, ese llorar de niños que rompe el alma en pedazos, vuelve a mí y pregúntame de nuevo. ¿Qué harías si fueras dueño del mundo?

El Reino de Dios
Arpas Eternas, Vol 3, p. 89. Duodécima Edición

miércoles, 3 de octubre de 2007

KRISHNA.avi




Krishna.avi

AMADISIMA MAESTRA LADY NADA


Nada es mío
Nada me pertenece
Nada tengo
Nada he tenido
Nada tendré
Nada reclamo para mí.

Nada soy
Nada he sido
Nada quiero ser
Nada seré.

Nada recuerdo
Nada me perturba
Nada pienso
Nada deseo

Nada es lo único que existe.
Nada es la única verdad.
Nada es lo único que quedará.
Nada en la eternidad.


FIN